Principio de Excelencia
Durante mi carrera profesional, de forma bastante inconsciente he ido pasando por diferentes compañías, aprendiendo y aportando a su cultura, aprendiendo mucho de la forma de trabajar en la compañía, aprendiendo de los profesionales muchas facetas para completar mi perfil y mejorar día a día intentando ser un buen profesional y mejor persona.
Como fruto de ese aprendizaje creo que se ha fraguado en mi perfil un axioma que lo he bautizado como “Principio de Excelencia”. Seguramente sea algo obvio para muchas personas, o bien, sea llamado de otras muchas formas, pero es algo que durante el último año me he propuesto fomentar y que sea algo que allá donde vaya intentaré ofrecer como valor personal para la compañía.
Principio de Excelencia:
1-. Busca siempre la forma de mejorar tu trabajo. Si ves que algo es mejorable, haz lo que puedas para mejorarlo y consigue que sea excelente.
2-. Una solución puede ser buena, pero siempre se puede mejorar. Buscar la excelencia debe ser tu mayor meta. Buscar la excelencia no significa explícitamente ser perfeccionista aunque pueda tener mucha relación. En determinadas ocasiones donde existen exigencias de cumplimiento de tiempos, la excelencia puede ser incluso reducir ese tiempo sin perder la calidad exigida. Perfeccionismo sería obviar la exigencia de tiempos y buscar sólo la solución perfecta y eso no tiene porque ser necesariamente la mejor. Siempre pongo un ejemplo para explicarlo. En algunas situaciones, la solución excelente es la que simplifica una posible solución perfecta sin perder el mínimo de calidad exigida.
3-. Nunca te quedes en lo que se espera de ti como algo normal. Busca siempre ser excelente y superar tus propias expectativas y metas. Mis padres me inculcaron desde el colegio que siempre debía mirar hacia los que hacen las cosas mejor que yo, y nunca mirar hacia atrás. Sin embargo, buscar la mejora constante nos hace mejores profesionales pero no necesariamente mejores personas. Busca personas de referencia de los que puedas aprender a ser mejor a nivel profesional y también a nivel personal.
4-. Ser humilde y aprender a reconocer abiertamente tus errores. El ser humano está pensado para errar, y también para mejorar siempre basado en los errores que hemos cometido anteriormente. La excelencia es buscar constantemente una forma de seguir aprendiendo de tus errores. A veces los errores se pueden corregir a tiempo y otras veces solamente podrás aprender de ellos para evitarlos en el futuro. Hacerse responsable de los actos erróneos es algo muy importante a aprender durante la carrera profesional, a pesar de que a veces un error es difícil de corregir y sólo quedará aprender de el error para no cometerlo más veces.
5-. Primero debes ser exigente contigo mismo para poder pedir a los demás ser excelente. Lidera dando ejemplo de lo que quieres conseguir. La excelencia es algo que se contagia y si das ejemplo de ello, será más fácil que otros busquen la excelencia de sus actos profesionales y personales.